Al igual que la piel, los labios requieren ser protegidos del daño solar durante todo el año , más aún durante el verano, cuando la radiación ultravioleta es más alta; pero todavía no hay suficiente conciencia de que esta zona de nuestro rostro también es susceptible de desarrollar cáncer.
Y como ocurre con otro tipo de enfermedades oncológicas, la atención a los factores de riesgo y su prevención son fundamentales. Además del sol, en el cáncer de labios también hay que preocuparse del consumo frecuente de alcohol y el tabaquismo.
“El cáncer de labios se clasifica dentro de los cánceres de cabeza y cuello y específicamente dentro del oral o de boca. Hay que mencionar que el de boca (intraoral) es un cáncer súper mórbido; es de decir, que deja muchas secuelas en los pacientes y esto por un motivo en particular, dentro de varios, que es el diagnóstico tardío de las lesiones”, señala el académico de la Facultad de Odontología, Bastián Godínez Pacheco.
El cirujano dentista explica que, en general, estas lesiones suelen encontrarse en estadios avanzados y, por ello, los tratamientos pueden ser muy agresivos. “Además tienden a tener una tasa de mortalidad alta a los cinco años; esto quiere decir que los pacientes tratados por cáncer de boca o después son diagnosticado, casi el 50% de ellos fallecen a los cinco años y ese porcentaje aumenta cuando el tumor es encontrado en la etapa más tardías”, agrega el encargado de la Unidad de Patología y Medicina Oral de la Facultad.
Afortunadamente, dentro del cáncer oral, el que afecta exclusivamente a los labios tiene un mejor pronóstico. “Se comporta más como un cáncer de piel. Pero sigue siendo una neoplasia maligna, que afecta básicamente al recubrimiento epitelial del labio”, dice el especialista en Patología Oral y Maxilofacial. En este caso, la sobrevida pasados los cinco años es de cerca de un 80%; “obviamente este porcentaje disminuye si se encuentra en etapas más tardías; pero es un factor a favor por sobre el carcinoma escamoso intraoral”.
Así como ocurre con la piel, en el cáncer labial el principal factor de riesgo es la exposición excesiva a la radiación solar que, como indica Godínez, es acumulable en el tiempo. Mientras más expuesta esté una persona al sol a lo largo de su vida, tendrá más posibilidades de desarrollar una lesión que apunta hacia el cáncer labial, que mayoritariamente -cerca de un 90%- se presenta en labio inferior.
De este modo, las personas más susceptibles a un cáncer de labios son quienes realizan labores al aire libre, como pescadores y trabajadores agrícolas, siendo los hombres los más afectados, aunque los números entre pacientes masculinos y femeninos han comenzado a acercarse.
“Es bueno destacar que el cáncer de labio no se desarrolla de un día para otro; muchas veces hay lesiones precursoras que denominamos desórdenes potencialmente malignos, como la queilitis actínica, que más adelante se podrían transformar en un cáncer de labio”, advierte el experto.
Entre estos signos potencial malignos se cuentan la pérdida de elasticidad en el labio inferior, adormecimiento, aparición de heridas que tardan más de dos semanas en cicatrizar o que provocan dolor o molestias y costras crónicas (que se mantienen en el tiempo), así como un límite difuso entre el bermellón (tejido mucoso) del labio y la piel contigua.
“Cuando el cáncer ya está instaurado, la costras permanecen por mucho tiempo, puede haber lesiones blancas o rojas, y obviamente si ya hay una úlcera de bordes elevados o francamente un nódulo o tumor, estamos en presencia de un cáncer escamoso de labio”.
En términos de cifras, y de acuerdo a la información del Observatorio Global del Cáncer (Globocan) cada año en el mundo se reportan 380 mil casos nuevos de cáncer de boca, incluyendo el de labio que se estima está entre el 25 y 30% de ese total.
El académico acota que estos números indican que esta patología del labio no es poco frecuente, sin embargo los reportes son escasos.
“De hecho, la última guía del Ministerio de Salud en este tópico no entrega mucha información; habla de mortalidad más que de prevalencia y dice que aproximadamente 1 a 1.5 pacientes por cada 100 mil habitantes pueden fallecer producto de cáncer de boca, incluido el de labios. Entonces, las cifras no son tan detalladas”.
Los expertos insisten en que la primera medida es evitar la exposición directa al sol, sobre todo en las horas de mayor radiación solar; e indican usar gorro y cuidar la hidratación, además de aplicar protectores específicos para los labios con factor de protección UV sobre 30 e idealmente 50. “En caso de que no puedan conseguir el labial, se puede aplicar el mismo bloqueador de rostro en el labio”, agrego Godínez.
La recomendación ante cualquier anomalía es consultar al dentista, ya sea en el centro de salud familiar o en clínicas particulares, o bien a un fonoaudiólogo que también está preparado para detectar lesiones en etapas tempranas, indica el académico.
Los especialistas se pueden encontrar en los hospitales Regional e Higueras y también en la Facultad de Odontología, que en su Clínica de Medicina Oral estudia las lesiones y entrega orientación a los pacientes, previa derivación por parte de un profesional de la unidad académica u otros centros de salud.
Las personas pueden solicitar una consulta en la secretaría de la Unidad de Patología y Medicina Oral, marcando el número 41 2220 4138.